Ir al gimnasio cuesta, por eso te decimos cómo motivarte para ir al gimnasio, para que no seas de las personas que se apuntan muy motivados y a las dos semanas dejan de ir.
Es muy cómodo llegar a casa y tumbarse en el sofá en vez de ir al gimnasio a levantar unas pesas o sufrir una clase intensa de spinning. Para evitar las tendencias del sedentarismo hay que buscar motivaciones que nos hagan desear que llegue la hora del gimnasio.
Ahora te damos unas claves para que te motives a ir al gimnasio
Piensa en los grandes beneficios que obtendrás
Tu principal motivación que debes tener para ir al gimnasio con muchas ganas es la consecución de los objetivos que te hayas propuesto. Tienes que marcarte una meta cuyo camino se irá acortando cada día que vayas a ejercitarte.
Piensa que si no vas al gimnasio, no avanzarás en ese recorrido y por supuesto no llegarás al objetivo que te hayas propuesto.
Por supuesto las metas que te marques deben ser realistas y a corto plazo para que no te desmotives por la lejanía o pesado que puede ser el tiempo. De esta manera, semana a semana irás viendo resultados y por consiguiente motivándote para seguir con el trabajo en el gimnasio.
Si ves que los resultados que esperas no llegan, por favor no te desanimes, tienes otra semana para intentarlo. También recuerda que no debes quemarte con tal de llegar a esa meta, planea bien tu rutina para ver objetivos cumplidos y disfrutar de tu estadía en el gym.
Aumentarás tu felicidad
El ejercitarte aumenta la liberación de endorfinas que se transforman instantáneamente en un aumento de la felicidad. Nuestro cuerpo reacciona, hace sentirnos plenos y orgullosos de haber realizado ejercicio.
Si además tienes hijos, hermanos, pareja o padres que no se animan a ejercitarse en un gimnasio, serás su ejemplo a seguir porque les transmitirás felicidad y ganas de ir al gym.
Si tú te sientes bien la gente que está a tu alrededor también querrá conseguir lo mismo y sentirse igual de saludable.
Lo ideal es que veas tu rutina de ir al gimnasio como algo normal y no como un sufrimiento. ¿Ahora te sientes listo para sentirte un poco más feliz?
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